Existe una gran variedad de vestidos para quinceaños, lo más tradicional es que escojas un vestido color crema, perla, blanco, palo rosa o alguno de tonalidad suave o pastel, pero si quieres salir de lo convencional, entonces una buena opción puede ser escoger algún vestido de color oscuro. Aquí te dejo algunas opciones de tres tonalidades fuertes y elegantes: azul, granate y verde. ¡Escoge tu favorito!
El azul es un color que refleja tranquilidad y distinción. El que te recomiendo hoy es de corte princesa, en versión straple y con una pretina con aplicación de pedrería que foma los senos y llega hasta el olbligo con un detalle. Es ceñido hasta la cintura, lo que permite formar las caderas y el esplendor a parte baja del vestido.
El granate en combinación con el negro jamás te hará pasar desapercibida. Este modelo es particular pues solo tiene una hombrera, desde donde se desprende el tul negro con aplicaciones que cubren la parte de los senos y se distribuye hasta la cintura. Lo mejor de este vestido es la parte de la cintura que ciñe lo suficiente y te hace ver totalmente plana en la parte abdominal. Puedes usarlo con o sin el chal.
El verde es un color que nunca pasará de moda. Las tonalidades de este varían, desde los pasteles hasta los más fuertes. Si quieres lucir como una verdadera princesa, entonces este vestido es para ti. La parte de arriba del vestido está tan adornado con aplicaciones desde el ceno hasta la cintura que ya no necesitas ponerte un collar, sino simplemente unos pendientes y quedarás estupenda. El acabado de la falda es voluptuoso para darle mayor realce a tu figura.
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